El Movimiento de Santa María es una asociación católica que sigue el carisma del sacerdote jesuita Tomás Morales, cuyos rasgos distintivos son la atención de las familias y los jóvenes, la importancia de la educación y la implicación en la construcción de la sociedad.
Tuvo sus orígenes en el Madrid de la pot-guerra, con la creación de la obra social ‘Hogar del Empleado’, en cuyo seno nació el instituto secular Cruzados de Santa María, que posteriormente daría origen a una obra educativa centrada en la educación de la juventud, especialmente a través de la educación no formal.